Madrid. Científico pionero en la aplicación de la inteligencia artificial al campo de la Medicina, el catedrático
de la UDC Alejandro Pazos Sierra no quiso en su discurso de ayer olvidarse de las raíces.
“Gran parte de este reconocimiento se lo debo a mis padres, que desde el cielo estarán orgullosos junto a
Carmen, Aurora y Pepe, y a mis hermanos. Sobre todo a Juan, siempre visionario, por delante de los acontecimientos,que hace más de 30 años me animó y apoyó para dejar la asistencia clínica hospitalaria e introducirme en el mundo de la Informática Médica”
En sus palabras, el premiado científico gallego aludió también a sus colegas.“En primer lugar, quiero
agradecer a la persona que me propuso para tan reconocido premio, en la seguridad de que pesó más la
amistad que los méritos. En segundo lugar, agradecer a la Junta Directiva de la Sociedad Española de Informática para la Salud, SEIS, por haberme otorgado este prestigioso galardón que, por lo que significa al haber sido otorgado por los compañeros profesionales del sector, hará que no desfallezca en la tarea de seguir intentando mejorar la calidad de vida de las personas”,añadió. ECG
El catedrático gallego Alejandro Pazos Sierra, recibió ayer en Madrid el Premio Nacional de Informática y
Salud que otorga la Sociedad Española de la Salud en reconocimiento a su pionera labor en la aplicación
de la inteligencia artificial al campo de la Medicina.
Ese galardón se suma a otros previos cómo su llegada al club de los Gallegos del Año que impulsa el
Grupo Correo Gallego. En su discurso de ayer, el eminente científico reconoció tantos los apoyos como
las querencias en su campo. “Aunque últimamente no esté de moda alabar la labor
de los políticos yo debo hacerlo con algunos de ellos porque es de justicia. Así, he de destacar a la que fue Secretaria de Estado de Sanidad y Conselleira de Sanidad de la Xunta de Galicia, Pilar Farjas; a los tres últimos Directores del ISCIII (Joaquín Arenas, Antonio L. Andreu y Jesús Fernández Crespo), a los responsables de las consellerías de la Xunta de Educación, de Economía, a través de la Gain, y de Sanidade,
a través del Sergas. Todos ellos no solo han financiado y están financiando una buena parte de los
trabajos realizados y en desarrollo por mi grupo, sino que, pese a sus múltiples ocupaciones, siempre he encontrado sus puertas abiertas para oír mis propuestas y siempre han intentado facilitar nuestra tarea”.
Además de esas palabras reconociendo apoyos, el galardonado recordó que todo VICENTE PLAZA Santiago
lo sembrado sirve de poco si la apuesta por la Ciencia no prosigue firme.
“Como persona del ámbito universitario y científico, no puedo dejar pasar la ocasión para hacer una reivindicación de la necesidad de que las administraciones públicas apuesten, aún con más intensidad y eficiencia, por la I+D+i”
En su discurso también hubo cierta autocrítica. “Los investigadores, sobre todo los de los organismos públicos de investigación tenemos que ser conscientes de que el papel que hemos de desempeñar no es permanecer en nuestra torre de marfil de la Academia. Tenemos la responsabilidad de devolver a la sociedad todo lo que podamos de lo que esta nos otorga financiando nuestros proyectos e infraestructuras científicas con los impuestos de las empresas y personas físicas. Así, nuestra obligación es formar a los estudiantes, becarios e
investigadores lo mejor que sepamos y trabajar para mejorar los procesos y productos que ofrezcan mayor
calidad a la asistencia que nos proporcionan las administraciones públicas, en nuestro caso la sanitaria”, subrayó Pazos Sierra.