TALENTO. En este país tan alérgico a apoyar la investigación hay personas cuya fe supera a la de los viejos buscadores de oro, una es Alejandro Pazos Sierra. Este catedrático de la UDC recibió ayer el Premio Nacional de Informática y Salud que otorga la Sociedad Española de la Salud, una distinción que le llega por su dedicación y acierto al aplicar la inteligencia artificial al campo de la Medicina. En su discurso dio las gracias a quienes le apoyan y a los anclajes emocionales de su Galicia natal pero no olvidó dejar claro que el I+d+i necesita apoyo constante. Y él bien lo merece.